El cerebro tiene un reloj interno. Este reloj gestiona todas las funciones del cuerpo. Le dice a tu cuerpo cuándo dormir, cuándo hacer la digestión, etc. Lo más importante que puede hacer para dormir bien es asegurarse de que este reloj esté bien ajustado. Pero, ¿cómo hacerlo?

La forma más eficaz de ajustar este reloj es despertarse todos los días a la misma hora. De este modo, su cuerpo sabrá instintivamente cuándo es hora de descansar y cuándo de despertarse.

Cuando su reloj interno está ajustado, le cuesta menos dormirse y se despierta con más facilidad. Esto conduce a un sueño mejor y más reparador.
Además, puede mejorar su salud general, su estado de ánimo y su capacidad de concentración durante el día.

Pero, ¿qué ocurre cuando este reloj se estropea? La forma más habitual de alterar el reloj interno es acostarse mucho más tarde de lo habitual. El cuerpo se desorienta durante varios días. Es como el jet lag.

Tu cuerpo ya no sabe cuándo dormirse, cuándo hacer la digestión, etc.

Así que, aunque te tiente quedarte despierto hasta tarde los fines de semana, intenta mantener un horario de sueño regular. Lo ideal es no dormir más de dos horas más de lo habitual. Tu cuerpo y tu mente te lo agradecerán. Por supuesto, a veces la vida puede alterar esta rutina, pero el objetivo es mantenerse lo más regular posible.

En resumen

• La regularidad es la clave para dormir bien y gozar de buena salud.
• Levantarse a horas regulares es lo más importante para dormir bien.
• Intenta no moverte demasiado en tus días libres.